GENERACION PERDIDA PARTE 4

GENERACION PERDIDA PARTE 4

EL SICARIATO (LOS VIDEO JUEGOS VIOLENTOS)

Por dinero, por poder, por obligación o por gusto, por placer o por necesidad, que factor orilla a los jóvenes a dedicarse al sicariato palabra no existente en nuestro diccionario español, pero deriva de la palabra sicario que significa el que se dedica a matar o matón a sueldo 1Su nombre proviene de la sica, puñal o daga pequeña, que se oculta fácilmente en los pliegues de la toga o bajo la capa, los investigadores de la UNAM denominan al sicariato la extensión del narco que dice nosotros estamos pagando por el sicariato en gran medida, es una de las perversiones dentro de un proceso de descomposición del Estado, 2la literatura universal manifiesta que el idioma a sufrido transformaciones al acunar términos como sicariato o sicariar Ambas expresiones aluden al asesinato por encargo, pero también a un desprecio excesivo contra la vida, en el que incluso participan niños. Ante esta realidad, han sido los escritores quienes se esfuerzan por comprender las sinrazones y alcances de esta brutalidad.

Políticas Publicas

Lo que realmente nos preocupa y nos debe de ocupar es la nueva generación a quien tenemos la obligación de salvar por eso debemos exigirle al estado que lance políticas públicas de prohibición de los video juegos violentos, que estos sean ilegales que pague con cárcel a quien los venda rente o reproduzca ya que al igual que la pornografía son dañinos para la salud mental de los niños y jóvenes, que desde pequeños empiezan a jugar sin saber los padres que estamos incubando un delincuente en potencia en este caso un homicida, tal vez parecerá exagerado para los padres de familia aceptar esta realidad, pero hagamos un recuento de los hijos que tenemos y que crecieron con los video juegos, en su gran mayoría son violentos son amenazantes son irresponsables, son burlones, comparémoslos con las generaciones pasadas las de nosotros como padres y las de nuestros padres en que no existían los video juegos, fueron y fuimos personas más sanas en cuanto a violencia se refiere y hubo caso excepcionales de algunos, pero hasta ahí en cambio esta generación que hoy sale al mundo está totalmente tocada por la violencia, otro ejemplo más claro si a los cinco años el niño tiene la destreza para jugar y avanzar en ese tipo de juegos y con los años siguen adquiriendo juegos cada vez más complicados y violentos y termina crecer con estos juegos llega un momento que estos ya no le satisfacen entonces lo que sigue es pasarlos a la realidad obviamente que no lo harían por si solos pero existe muchos criminales que se pelean por reclutarlos y enseñarlos para que disparen en la vida real ya no dentro de una televisión o maquina de video ya que de uno a otro solo existe un paso y este paso sobra quien le ayude para darlo, acuérdese el sicario o matón no nace se hace y no se hace fácil, lleva un proceso que empieza precisamente con los video juegos violentos aunado a la violencia familiar y otros factores de la descomposición social, y que la obligación como padres miembros de una sociedad es no contribuir en ese proceso, salvemos a la siguiente generación destruyamos todos los elementos que le perjudiquen y hagamos de ella la generación modelo que empiece con la reconstrucción del tejido social.

Si el sicario comienza a sicariar por poder, por obligación o por necesidad económica, por lo que sea que comience es secundario una vez iniciado le hace vicio por la necesidad de sentir la adrenalina que libera su cuerpo, aquí lo importante es no dejar que se inicie en esa actividad que ya no permite regreso, brincando esta raya solo muerto se regresa y debiendo todas la muertes que causo que alteraron un ciclo de vida que atentó contra la justicia divina que es la única que tiene potestad sobre la vida y la muerte, y que ni en cien vidas le alcanzara para pagar el mal que hizo.

Salvemos a la siguiente generación que esta ya está perdida.

1 http://es.wikipedia.org/wiki/Sicario

2 http://blogs.periodistadigital.com/arte.php/2007/03/07/ique-es-la-literatura-del-sicariato